La forma de ver el mundo depende del lugar en el que te encuentres, pero también la forma de sentir. Todo lo que nos rodea ayuda a formar una visión del mundo concreta; la experiencia nos ayuda a desarrollar nuestros valores y formas de vivir.

Al hablar con polacos en la vida diaria sobre cosas cotidianas, me sorprendí de muchas reacciones, formas de hablar, de expresarse y también de un fenómeno que hasta ahora me hace reír: La temperatura corporal.
¿Cuál es la temperatura normal de una persona sana?
Si hiciéramos esta pregunta en España, ¿qué escucharíamos? Creo que escucharíamos algo como: 36ºC. Más bien, depende a quien preguntes, porque también he escuchado que dicen 36.5ºC.
Sin embargo, si esa pregunta se la hacemos a un
polaco, la respuesta es específica y concretamente: 36.6ºC
La respuesta me dejó patidifusa... ¿36.
6? Ni 36.4, ni 36.5, exactamente 36.6.
El cachondeo continuó hasta que, en mis andaduras por tierras polacas, un buen día caí enferma. Qué cara se me quedó, cuando, ya recuperada, comprobé que mi temperatura era como ya me habían avisado antes: 36.6. ¿Serán los termómetros polacos? ¿Funcionaría mal mi termómetro?

Al tiempo, ya en España, salió tan inquietante tema de conversación entre polacos. Después de exponer nuestras teorías, decidimos comprobar qué temperatura tenían los polacos en España. Efectivamente: 36ºC
Es posible, que si un científico, doctor o experto en temperaturas considere que este tema es absurdo, ya que el cuerpo se adapta al entorno y por diversos motivos nuestra temperatura corporal cambia constantemente. Pero, ¿acaso no es curioso que tengamos dos respuestas tan concretas para una cuestión así?
En el caso de los humanos la
temperatura corporal es aproximadamente de 37ºC. Más exactamente, la
temperatura promedio en humanos es 36.7ºC, aunque puede variar de un sujeto a otro,
y el 95% de los sujetos tienen una temperatura entre 36.3 y 37.1ºC. Por otro
lado, la temperatura en un sujeto puede variar a lo largo del día, siendo un
poco más baja de madrugada y 0.5ºC más alta al anochecer. Durante el sueño la
temperatura se regula peor y tiende a bajar. En las mujeres la temperatura
aumenta medio grado en la segunda parte del ciclo menstrual, después de la
ovulación.
Dejando a parte la ciencia y la
termorregulación, esta cuestión superflua plasma las diferencias culturales que podemos distinguir en otros países, que se convierte en importante al hablar de traducción.
En este caso, podemos observar que hasta los títulos de las canciones reflejan esta realidad:
La letra de la canción cuenta que no hay termómetro que mida su temperatura y que 36,6ºC es algo que da risa en comparación con lo caliente que está.
Gorąca lawa płynie w moich żyłach jak krew
Na termometrach skala dawno skończyła się
Jak ugasić pożar który płonie we mnie
dobrze wiem że to wołanie jest daremne
Tego ognia nie powstrzymasz choćbyś bardzo chciał
Nie ugaszę żaru jaki siedzi we mnie
dobrze wiem że to wołanie jest daremne
36 i 6 to przy niej zwykły żart
En definitiva, el tema de la temperatura corporal va relacionado con una cuestión de carácter:
El español redondea, el polaco es exacto.
¿Qué opináis?