
En el camino que recorre el estudiante de cualquier lengua junto a ésta, ya sea polaco, inglés, alemán... se requiere mucha dedicación para mantenerla viva y que las palabras que un día conseguimos retener con éxito en nuestra mente salgan cuando las necesitemos. A mí, como a muchos otros, me llenado de frustración al ver que mucho de lo que conozco se desvanece cuando tengo que hablar.
Al aprender una lengua tendemos a ser pasivos, estudiamos gramática y vocabulario, leemos y hacemos ejercicios. Hay que alternarlo con el modo ACTIVO, es decir, hablar, hablar y hablar!
¿Qué hacer para mejorar la agilidad?
1. Sumérgete en la lengua.
Camina, come, respira en un lugar donde se hable la lengua que estudias. Según mi experiencia con los idiomas, hay que practicar constantemente. Lo mejor es vivir en un entorno donde se hable esa lengua. Puede ser el país, claro, pero a veces nos vamos allí y nos rodeamos de compatriotas o al final, no sabiendo muy bien cómo, nos relacionamos en nuestra lengua materna. Por lo tanto, si uno decide irse a otro país para practicar la lengua, hay que ser consecuente.
2. Cursos
Si no puedes irte a Polonia a vivir, ¿por qué no organizar un
curso (intensivo) en verano? Hay muchas universidades y academias que ofrecen estos servicios y sería una buena manera de conocer a gente como tú, un poco de cultura y gastronomía y alguna bonita ciudad.
3. Amigo/pareja/conocido...
Tener un contacto en nuestra agenda con el que se pueda practicar regularmente es una ventaja que deberíamos intentar tener. Ni qué decir que teniendo una pareja se adelanta sobremanera si se es constante. La lengua es un método de comunicación y a veces no hacemos un esfuerzo con nuestra pareja, no nos obligamos a usar su lengua por comodidad, rapidez o economía.
Si es tu caso, ¡no dejes de aprender con la persona que tienes al lado! Eso sí, tienen que corregirte, porque entonces no aprenderías tanto.
4. Películas/dibujos/documentales/series.
Pasar horas en frente de una pantalla también tiene resultados positivos. Es una forma pasiva de aprender, pero funciona para mantener despierto todo lo que sabes y aprender cosas nuevas, no sólo la lengua, sino también la cultura y forma de reaccionar y comportarse de aquellas personas.
Para los estudiantes de
polaco recomiendo todas las películas que tenéis en el apartado de
Películas Modernas (las antiguas son muy difíciles). También recomiendo series como
Przepis na życie,
Ranczo,
M jak miłosc, etc.
5. Cantar
O también escuchar canciones, bajarse las letras, practicarlas y/o traducirlas es también un buen método para aprender y practicar pronunciación. Hoy en día las posibilidades de obtener música polaca son muchas. En este blog hay entradas relacionadas con la música y artistas polacos, además de tener siempre propuestas directas en forma de vídeo.
6. Revistas/libros/periódicos, etc.

Además de mantenerte al día, leer revistas y/o periódicos es una buena forma de adquirir nuevas palabras y hacer que nuestra mente trabaje. En la sección de prensa podéis encontrar varios enlaces a periódicos polacos. Si os gustan las revistas, es fácil encontrar la versión polaca, a las mujeres recomiendo
Twój Styl o
Pani.
También es bueno leer libros para niños o adolescentes. Lo malo es que si son muy infantiles corres el riesgo de aburrirte con la historia, pero por experiencia personal, si entiendes lo que lees te motivas a seguir leyendo.
7. TABÚ
¿Conoces el juego Tabú? Si tienes la oportunidad de jugar, pondrás en práctica muchas de las palabras que tenías aparcadas, ya que tratar explicar un concepto sin usar determinadas palabras hace que te las arregles y busques otros mecanismos y palabras para ganar un punto.
Éste sería un buen recurso para profesores, aunque no se puede poner en prácticas en niveles muy bajos.
8. Seguir blogs.
Por supuesto voy a proponer el blog de mi mentora :)
Po polsku
Es una buena forma de encontrar explicaciones, cosas interesantes y recursos.
Todas las lenguas son difíciles, el polaco es una de las que más cuesta hablar sin errores y que nos entiendan. Sin embargo, con constancia y empeño acabarán confundiéndote con uno de ellos!
¡MUCHO ÁNIMO!